El brazo de gitano o manga gitana es un pastel relleno que se arrolla en forma de cilindro. Se elabora con una masa genovesa de bizcocho y es cubierta de una mermelada o crema de nata, moca o chocolate y luego enrollada. Puede estar decorado con una cobertura de azúcar glas, chocolate, glaseado, quemada, merengue o nata, entre otros.
Este pastel tiene su origen legendario en un monje berciano que en el medievo recorrió el mundo y en un monasterio egipcio descubrió este postre y lo trajo a España. Otra versión menos legendaria se refiere a los caldereros gitanos que, desde principios del XIX y primera mitad del siglo XX, recorrían las pastelerías de Barcelona vendiendo recipientes de cobre y otras chamarilerías y que eran "recompensados" con recortes sobrantes de bizcocho del día que "apoyaban sobre su brazo" y que para poder ser transportados enrollaban en una plancha de bizcocho. Cuando se marchaban con su cilindro de recortes apoyado en el brazo, los operarios del obrador comentaban: "Qué bien va el pastel en el brazo del gitano".
Ingredientes para el bizcocho:
- 100 gr. de harina
- 80 gr. de azúcar
- 6 huevos
- 1 sobre de azúcar vanillado
- 1/2 cucharadita de levadura en polvo
Ingredientes para el relleno:
- 250 gr. de mermelada de fresa
- 500 ml. de leche
- 100 gr. de azúcar
- 50 gr. de harina
- 2 huevos
- 1 rama de canela
- 1 pizca de sal
Además:
- Azucar glas (para espolvorear)
Elaboración:
1º Para la crema pastelera (podéis ver aquí el paso a paso), en un cazo aromatizar la leche con la rama de canela y una pizca de sal. En un bol batir el azúcar y la harina con los huevos. Una vez que la leche haya hervido retirar la rama de canela. Agregar un poco de leche a la mezcla de los huevos para que esta se haga más ligera y más manejable. Agregar la mezcla al resto de la leche y remover a fuego lento, de forma continua con unas varillas, hasta que la crema espese. Retirar a un recipiente y reservar hasta que enfríe.
2º Forrar una bandeja de horno con papel vegetal y reservar.
3º Precalentar el horno a 200ºC.
4º En un bol poner los huevos con el azúcar y el azúcar vainillado. Batir hasta conseguir una crema esponjosa blanquecina.
5º Incorporar a la mezcla la harina tamizada y la levadura. Mezclar con movimientos envolventes hasta que la harina quede totalmente integrada y que esta no pierda su esponjosidad.
6º Verter la mezcla sobre la bandeja de horno y extender por toda la superficie con la ayuda de una espátula.
7º Hornear durante 10 minutos o hasta que adquiera un tono dorado.
8º Retirar del horno y colocar una hoja de papel vegetal por encima. Voltear la plancha de bizcocho y con cuidado retirar la otra hoja de papel.
9º Cortar los bordes del bizcocho para hacerlo lo más regular posible. Poner en la superficie la mermelada de fresa y estirar por todo con una espátula. Después hacer lo mismo con la crema pastelera. Con la ayuda del papel enrollar en su totalidad.
10º Finalmente, una vez frío en su totalidad, espolvorear al gusto con azúcar glas, cortar los extremos y colocar en el plato para servir.
Este es su aspecto final...
¡¡Sin duda es el postre perfecto!!
Su sabor y su frescura hacen que sea una pastel de 10.
Un besito -Sandra von Cake-
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